De festejos...

Hola a todos, queridos lectores:

Durante este ultimo mes he estado completamente perdido y dejenme contarles de las razones.

Todo comenzo la primer semana de febrero cuando mi hermano se caso por "las leyes del hombre" y se organizo una comida en casa de mis papás. La boda algo "x" pero siempre es grato convivir con los primos y primas que nunca ves, más que en bodas y funerales.

Despues seguimos con la celebración de los 80 años de mi abuela materna y consiguiente comida familiar.

Continuamos con celebraciones catorcefebrinas y una buena oportunidad de negocio con una vecina (tiene una tienda de regalos y nosotros una papelería). Seguimos con un fin de semana completo para que mi esposa escogiera su outfit para la boda religiosa de mi hermano y acabamos con la boda religiosa de mi hermano.

Mis hijos enfermaron de nada. Nada segun los doctores pero es increible que dos niños tengan 40ºC de temperatura corporal y que empiecen a decir incoherencias; esto último provoco que estuvieramos un buen rato encerrados y que nos despelucaran entre doctores, hospotales y medicinas cerca de $10,000.00 . Es increibles que los médicos sean tan caros. Pero en fin, lo importante es que mis hijos estan bien, que el negocio marcha bien y que yo creoq eu este mes pinta un poco más tranquilo en cuestiones de trabajo.

Pero las celebraciones no acaban..., mis papás cumplieron 35 años de casados, mi papá cumplió 60 años de edad el 4 de marzo (ahora ya se va a jubilar y segun él a disfrutar su lana), mi hijo cumple 6 años el 25 de marzo.

Hablando del cumple de mi hijo... esta muy emocionado porque mi papá le regalo de cumpleaños adelantado boletos para que vayamos el abuelo, yo y mi hijo a ver a México al Azteca contra Costa Rica. Creo que será una hermosa experiencia para mi hijo.

Yo aún recuerdo el primer partido de la selección mexicana que vi en vivo en el Azteca. Fue en el Mundial de México 86, México vs. Paraguay, tenia 11 años y no entendía porque tanta genta iba al estadio y porque todos estaban tan emocionados. Me fui contagiando de esa emoción mientras llegaba al estadio. Nunca olvidare la potente voz de casi 100,000 personas cantando el himno nacional mexicano (de recordarlo se me enchina la piel) y los gritos de Mé-xi-co, Mé-xi-co y "A-Bue-lo" "A-bue-lo".

Ojala mi hijo lo pueda vivir tambien.

Se que en estos momentos en que el horizonte financiero y social no pinta muy bien, esto puede parecer una frivolidad, pero... es un elemento de unidad nacional y creo que debemos sentir que México sigue vivo y que su corazón late fuerte.

Saludos a todos. Buena semana