viernes, 12 de febrero de 2010

El diente

El pasado 1 de febrero mi hijo se acerco a mi esposa y a mi y nos dijo que sentía flojo su diente, nos asomamos a su boca y vimos que efectivamente habia un diente flojo (el primer diente flojo) y que justo detrás de él estaba otro incipiente diente. Dejamos correr una semana y como no se aflojaba y el diente trasero cada vez era mayor, acudimos al dentista y nos dijo que todo iba bien y que si no se caia en cuatro dias pues se lo sacaba.

Durante estos casi 10 día mi hijo tuvo varias problemas en la escuela; lo reportaron por contestarle mal a las misses (lo amenazaron con reportarlo y el dijo: "A ver, repórteme"), le dio un puñetazo en la cara a otro niño porque lo empujo dos veces en el salón, en fin, minucias; la verdad es que estaba insoportable en casa y creemos que el diente lo tenía muy mal. Imagino que estaba muy estresado porque nunca se le habia caido un diente y además fue el último niño en su salón que los comenzo a perder.

Finalmente el dentista le saco un par de dientes (el flojo y otro no flojo pero que en cualquier momento se iba a aflojar) y de repente allí estaba otra vez, el niño alegre y tierno que siempre ha sido.

Llego la noche y el momento en que dejo los dientes debajo de su almohada (me gusta la palabra almohada, es como una invitación a relajarse) dentro de un estuche que el dentista le regalo. Se durmio y durante la noche el ratón le canjeo los dientes por 2 X $50.00 (nada mal) y el ratón se iba cuando vio algo a un costado de los dientes, era una carta que decía (palabras más, palabras menos): "Querido ratón, te dejo mis dientes, quiero que se me terminen de caer todos, ¿por qué no se me caían? Quiero explicaciones."

Asi o más claro...por cierto, Ratón: yo tambien quiero explicaciones.

martes, 9 de febrero de 2010

El diluvio que vino

La semana pasada fuimos testigos de un aguacero como nunca había yo visto en la región central del país. Por acá, en Metepec, la lluvia nos acompaño un poco más de 4 días con ligeros descansos. El viento sopló tanto que en las noches escuchaba el golpeteo como de navajas de las gotas en la ventana de la recámara.

El ánimo general de la población se torno un tanto agresivo, muchas peleas hubo, pero que tal el viernes. El cielo completamente limpio, completamente azul y el titán del valle de Toluca cubierto de nieve en su cima.

Ver el Zinacantepetl (Nevado de Toluca) con su manto nevado es una de las mejores imagenes que pueden existir en la vida.

Nada que ver con las imagenes que llegaban a través de la TV de lo que acontecia en Valle de Aragón...lugar donde viví hace 8 años cuando recién me casé. Creo que por algna razón la vida me ha tratado bien.

Giro de 180º. El domingo fui feliz....ganaron los Santos.

Saludos a todos

PD...quiero irme de campamento con mi hijo (7 años)...alguien sabe de un lugar seguro para acampar cercano a la ciudad de Toluca (no se vale en el jardín de la casa).