miércoles, 29 de octubre de 2014

De cuando las derrotas son victorias

El día de hoy me he dado cuenta que hace 8 años cometí un error cuando decidí trabajar donde estoy trabajando.

Y con esto no quiero decir que tenga un trabajo que no me guste o que me satisfaga, con esto quiero decir que he vivido los peores 8 años de mi vida en este lugar.  Puede sonar contradictorio, pero no lo es. Digo esto porque hoy me he dado cuenta de mi real situación en este lugar, donde aparentemente formo parte de "la corte celestial" y tengo muchos privilegios y ostento mucha responsabilidad, sin embargo me dí cuenta que no tengo nada y que si comparo el ser humano que era hace ocho años y el que soy ahora, prefiero mil veces al de entonces, que sigue aqui conmigo, pero que no puede salir, que no es apreciado.

En fin, lo importante es que me he dado cuenta y ya le puse una fecha límite a esta situación, ya no hay marcha atrás y aunque suene loco dejare pronto mi esfera de privilegios para adentrarme en una aventura que me puede hacer feliz.  El premio vale el riesgo, asi que, let's move it.


lunes, 8 de septiembre de 2014

El secreto esta en dejar que las cosas pasen

Hoy se me antoja hablar de algo que en su momento puede parecer intrascendente, pero que a partir de allí he podido hacer inferencias para la vida misma.

El pasado sábado fui a comer junto con mi familia a casa de mis papás.  Originalmente el menú era otro, pero por alguna extraña razón mi papá decidió que lo que quería comer era carne asada.  El problema fue que eso lo decidio a la una de la tarde; la carne yacía dentro del congelador a -23ºC. Discutimos un poco acerca de la conveniencia de comer carne o no, podíamos haber ordenado comida china o japonesa o como último recurso ir a un restaurante, pero no, él se empeño en la carne asada y he de decir que comí la peor carne asada de la vida.

Al margén de esto, he de decir que para mi la carne asada es todo un ritual de convivencia familiar, puedo decir que las mejores carnes asadas de mi vida las he comido con mi esposa y mis hijos y se convierte en toda una experiencia.  Todo inicia desde muchos días antes, entre 15 y 30 días tomamos la decisión de comer carne.  Vamos los cuatro y compramos carne de la mejor calidad que el carnicero y el bolsillo pueda proveer en ese momento, cada quien escoge su "trozo de vaca"; llegamos a casa y lo metemos al congelador donde lo dejamos esperando para ser devorado.  Tres días antes de comerlo, lo sacamos del congelador y lo pasamos al refrigerador para que se vaya descongelando "muuuuuuuuy" lentamente.   Este paso es primordial para que la carne se mantenga jugosa y con un sabor celestial.  Por la mañana del día en que la comeremos, sale del refirgerador y le unto aceite y un poco de sal de grano, la cubrimos con un trapo y esperamos a que el fuego este listo.   El fuego es otro asunto de paciencia, en nuestro caso, iniciamos colocando el carbón como una pirámide alrededor de unos trozos de ocote, cuidando que la pirámide permita el flujo de aire entre los carbones y luego todo es cuestión de esperar a que salgan flamas, momento en el cual, destruimos la pirámide y extendemos el carbón por todo el asador, cortamos algunas hierbas del jardín ( a veces romero, otras albahaca, otras epazote) y las echamos para "perfumar" el fuego, mientras estamos limpiando cebollas, chiles, bebiendo cerveza o jugo y platicando tranquilamente.  Todos participan y todos esperan el momento de comer.   Llega el momento de poner la carne en el asador, el calor debe ser intenso pero no tanto, a veces hay que esperar hasta media hora para que esta en su punto, se coloca, se voltea y cuando parece que ya esta lista, hay que sacarla y dejarla reposar unos 5-7 minutos, durante los cuales todo mundo saliva, porque la tentación es grande.  En fin todo este choro para decir que una buena carne asada toma cerca de un mes desde la planeación hasta que acaba en tu plato y que una vez que inicias el proceso pueden pasar desde las 10 de la mañana hasta las 3 de la tarde para que acabe una grandiosa pieza de carne lista para ser degustada.

Y como esto, pasa con las mejores cosas de la vida, puedes tener la misma carne, el mismo asador y las mismas personas alrededor, pero si intentas apresurar las cosas, no darles su tiempo, ni respetar sus procesos de asimilación tendrás la peor experiencia carnívora; una carne seca o una carne quemada por fuera y cruda por dentro o en el mejor de los casos una carne sin sabor.

Y aqui es donde comprendí aquello que los froncófonos llaman laissez-faire, laissez-être.

Saben... creo que esos conceptos son claves en la busqueda de la felicidad.

Por hoy no queda más que ser feliz.

martes, 29 de julio de 2014

Psst, psst

¿Hay alguien aqui?  Creo que no.  No se que es lo que esperaba si incluso yo abandone esta cueva.

Y ...¿cómo no abandonarla?  Maestría, trabajo, hijos creciendo, cirugías, etc..  En fin, en este tiempo me he ocupado de vivir. 

Tengo la firme intención de volver a dejar rastros de mi pasado y de mis pensamientos.

Asi que no queda más que decir: Bienvenidos de nuevo a la cueva

El compadre

jueves, 10 de mayo de 2012

Madre solo hay una...gracias a Dios

Espero que el día de hoy todas las que son madres se la pasen muy bien y que no sean victimas de algunos hijos, que con el vil pretexto de visitarlas y celebrar las hacen trabajar haciendo comida y limpiando su cochinero después, vaya, no sean lacras y mejor pidan pizzas (aun no conozco a nadie que se resista a una pizza calientita y con mucho queso).

Después de este deseo, quiero reflexionar sobre la maternidad.  Yo vivi de cerca la transformación de una mujer en mamá, hablo de mi esposa.  Ella era una persona apasionada por su trabajo, por su profesión, por si misma; cuando nació nuestro primer hijo fue triplemente apasionada por aquellas cosas que la hacian mejor como persona, su objetivo era ser un ejemplo para su hijo y vaya que lo ha logrado.  No cabe duda que ser madre hace que aflore lo mejor de cada mujer y lo vuelve esplendoroso.

En fin... me voy a comer (no con mi mamá que esta un poco lejos), tengo mucha hambre.
BYE

miércoles, 14 de marzo de 2012

El encuentro con la velocidad ... y con mi hijo

"El freno de mano puede hacer de una curva una autentica obra de arte" Carlos Sainz (piloto español)

Más de cinco años habían pasado desde la primer ocasión en que escuche hablar del Rally México que pertenece al serial del WRC (Campeonato Mundial de Rallies). Por alguna razón nunca había podido asistir, ya que generalmente se cruzaba con el cumpleaños de mi papá y eso de faltar a las comidas familiares en honor a mis padres no se me hace correcto.

En diciembre del año pasado me enteré que en el 2012 el rally se correría una semana después de lo acostumbrado y me di a la tarea de encontrar acompañantes para ir y conocer de primera mano lo que era un rally de categoría mundial.

Siempre había escuchado en los medios de comunicación especializados que los mejores pilotos del mundo no se llamaban Schumacher ni Alonso y mucho menos Vettel o Fittipaldi; los mejores pilotos se llamaban Loeb, Solberg, Ogier, Sainz, entre otros, en otra palabras, era apuesta segura para los que gustamos de la velocidad. Por esto pense que no sería dificil encontrar con quien ir a la sierra de Lobos en Guanajuato. Pero como ocurre a veces me equivocaba, no mucha gente esta dispuesta a ir 4 días a Guanajuato, asolearse y empolvarse 12 horas diarias en promedio y pernoctar en una casa de campaña, con el objetivo de ver pasar 14 coches durante 35 segundos o menos.

Pensé que me quedaría sin ir, pero no contaba con que mi hijo de 8 años(cuya pasión se ha enfocado al automovilismo en todas sus manifestaciones) se apuntó para el viaje. Mi esposa trato de convencerlo de que era pequeño, de que ibamos al cerro, de las incomodidades, en fin, de que no fuera. El se mantuvo firme y se documento en el mundo de los rallies.

Conseguí la guía de espectadores con los mapas, los cierres de camino, las ubicaciones, compre algunos boletos para etapas en la ciudad de León, pedí vacaciones; mi hijo adelanto sus deberes escolares sacrificando horas de juego una semana antes y finalmente llego el ansiado día 8 en la mañana.

Con un par de mochilas, una hielera y mucha emoción partimos los dos desde Metepec hacia León. Ya estando en el viaje le dije a mi hijo que había reservado un hotel, ya que este año se había implementado un nuevo servicio que ayudaba a no pernoctar en el cerro. Este servicio se llamo el autobus verde y consistía en un autobus que te llevaba a las etapas, sin dormir en el cerro y sin esperar a que volviera a abrir el camino, lo que favorecia nuestro descanso.

Llegamos a León, nos instalamos en el hotel e inmediatamente partimos hacia el Poliforum, compramos los boletos de autobús y nos metimos a ver los coches de competencia que en ese momento estaban en el garage ajustando los ultimos detalles para salir a Guanajuato donde se llevaría a cabo la arrancada y la primer etapa.

En el garage nos pudimos tomar fotos con algunos pilotos (Sebastien Loeb, Nikko Hivonen, Naseer Al-Attiyah y Paulo Nobre) y mi hijo converso con algunos de ellos acerca de su motor y de su auto; imagino que les llamaba la atención que un niño mexicano de 8 años les preguntara de la potencia y de la suspensión de sus autos en inglés, por lo que gustosos platicaban breves momentos con él.

A las 4 de la tarde llego la hora de abordar el autobus que nos llevaría de León a Guanajuato, llegamos a Guanajuato cerca de las 5 de la tarde y nos dirigimos inmediatamente a la Explanada de la Alhondiga de Granaditas, lugar donde a las 8 tendría lugar la arrancada del rally. Bailables folcloricos, edecanes, música y fuegos artificiales fueron el preámbulo de la arrancada. Afortunadamente estuvimos ubicados en la 3a fila por lo que la vista era inmejorable.

Apareció el primer piloto (Araujo de Portugal) en su Mini Cooper y acto seguido arranco.

Pasaron los 14, los más ovacionados Loeb, Solberg y Ken Block (si puede busquen videos en Youtube de este ultimo, es todo un show). Acabo el evento y volvimos a León, llegamos cerca de las 11 muy cansados pero felices, ya que el viernes iriamos al cerro a ver la verdadera acción.

El plan era levantarnos a las 5:30 a.m. para abordar el camión a las 6 a.m. y volver a las 4 p.m. a León para ir por la noche al Autodromo a la Special Stage. En realidad nos quedamos dormidos y a las 7:15 nos desperto el sonido de un auto a toda velocidad, me asome por la ventana y estaba pasando el primer auto rumbo al cerro. Mi hijo y yo salimos en pijama de nuestro cuarto y nos sentamos frente al hotel a ver pasar los autos, nos vestimos y nos fuimos en el camión de las 11 a.m. Al llegar nos acomodamos, platicamos, bebimos cerveza y jugos hasta que aparecio el coche de seguridad, entonces guardamos todo y nos dispusimos a ver el espectáculo. Autos con 350 CV corriendo a cerca de 180 Km/h en terracería con curvas cerradas y con voladeros al lado, es simplemente un espectáculo emocionante. En la noche en el autodromo nos dimos una buena mojada a causa de un diluvio, que hizo que las carreras fueran más emocionantes.

El sábado otra vez al cerro, pero ahora había una diferencia, mi papá nos acompañaba. Es la primera vez que saliamos juntos y solos los tres: abuelo, hijo y nieto. En verdad fue un momento memorable, se desarrollo un sentimiento de complicidad y lo disfrutamos como enanos. Al regresar del cerro fuimos a comer y de vuelta a nuestra casa.

Por ahora solo queda esperar 51 semanas para volver a estar en Guanajuato.

Y cuando pueda subo fotos.

Bye

jueves, 1 de diciembre de 2011

Es como las redes wi-fi

En realidad no sabía como nombrar este post. No pienso hablar de tecnología, no pienso hablar de computadoras, pienso hablar de algo que flotaba en el ambiente.

Estaba allí, se percibía, pero ninguno quiso que pasara, en realidad no se si tu querías, pero yo si tenía ganas. No se porque, pero me contuve. No fue una vez, fueron miles. Y yo con el corazón hecho nudos y la cabeza a punto de estallar (bueno al menos yo quería que estallara, para que no peleara con el corazón).

Entonces entendí que la omisión era tanto o más contundente que el hecho, lo que esperaba nunca llego.

Ahora es muy tarde, para seguir pensando en que llegará, sin embargo me hubiera gustado que, al menos por un momento volvieras.

.
.
.
.
.

En fin, esto de estar enfermo de la gripa y tomar antihistaminicos si te pone en otro nivel.

Buen día a todos

.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde

¿cuantas veces hemos sido indiferentes a personas o situaciones de nuestra vida?

¿cuantas veces nos hemos arrepentido de no haberles prestado atención mientras estuvieron con nosotros?

A mi solo una y creo que aprendí bien la lección.

Que tengan un feliz día

martes, 25 de octubre de 2011

Somebody to love

Can anybody find me somebody to love?
Queen

Toluca y Metepec, amanecieron frios (-1ºC).

Hoy por la mañana fui a dejar a mis hijos al colegio (como todos los días), el camino es muy corto (6 o 7 minutos) por lo que regularmente aprovechamos el tiempo para platicar de sus planes del día, sin embargo, hoy mi hijo me dijo "Música Maestro", que es nuestra clave para cuando alguien quiere música del iPhone. Lo conecté y seleccionamos una canción al azar, el resultado fue "somebody to love" de Queen.

Esta canción siempre me ha gustado ya que a pesar de que es un lamento de soledad, no pierde la esperanza de encontrar alguien a quien amar y la música es de esas que llena de energía por las mañanas; asi que se las dejo para que la escuchen y la compartan con mis tripulantes y conmigo.

http://youtu.be/LRt2jX1kaYo

Ya se me olvido como poner videos aquí....mientras les dejo la liga.

PD. Las cervezas sobre el piano...como me acorde de ti Manzano.



Feliz día y recuerden ser felices

viernes, 21 de octubre de 2011

Tesoro

¿Te ha ocurrido que al usar un abrigo encuentras dinero o una joya preciada que creias perdida?

El sentimiento de felicidad es inenarrable.

Hace poco esa felicidad me invadio. Encontre un "tesoro" que creia perdido. Y no, no encontre nada en ningun abrigo, te reencontré.

Gracias a Dios.

miércoles, 22 de junio de 2011

El llanto

Muchas veces nos dicen "no llores" y tantas otras hacemos caso.

Cuando niños, "el que llora es niña", es cotidiano. Todo esto viene a cuento porque hace unos días mi hijo hizo su primera comunión. Y mientras la ceremonia transcurria me puse a llorar como la mismisima María Magdalena.

No se como ni porque pero el hecho es que a media ceremonia comence a sentir en mi corazón una arritmia, poco después senti que mi corazón daba un vuelco e instantes más adelante estaba con los ojos rasantes de lágrimas.

No se a que atribuirlo, y pensandolo bien, no pretendo razonar al respecto. Simple y llanamente me sentí feliz y ahora entiendo a aquellos que lloran de felicidad.

Lo único de lo que si estoy seguro es que por primera vez en mi vida estoy completamente seguro de que Dios existe y que toco mi corazón, a través de mi hijo.

Saludos a todos