viernes, 22 de enero de 2010

Fin de semana de finales

Voy Santos y Jets...¿y tú?

Saludos

miércoles, 6 de enero de 2010

Melchor, Gaspar y Baltazar

Hoy como muchos de ustedes saben se celebra en México el día de Reyes. Esta tradición yo la veo como una celebración para el niño que todos llevamos (o deberiamos llevar) dentro.

Es un buen momento para que renazca la esperanza, es un instante en el que avivamos la llama de los niños y por ende le metemos energía al mundo.

Los que tenemos la fortuna de tener hijos pequeños, nos la pasamos preparando el momento, ayudandoles a hacer sus "cartitas", este año mis hijos fueron más lejos y pidieron que pusieramos lechugas, zanahorias y un poco de alfalfa para los animales de los reyes magos, no podian faltar los jugos y las galletas para los reyes.

Hoy llego mi hijo a las 5:30 a.m. a mi cama y me dijo: "Papá ya desperté, quiero ir a ver si llegaron los reyes" yo, completamente adormilado le dije, "Hijo es muy temprano, mejor duerme otro rato" y lo lleve a su cama, en el camino le dije"que tal si no han llegado, mejor duerme hasta que amanezca" y el me dijo: "no papá, ellos llegan cuando nosotros dormimos y cuando despertamos estan los juguetes, es mágico".

No me quedo otro remedio que bajar juntos y acompañarlo al árbol, cuando encendio la luz su cara de sorpresa me dejo impactado, inmediatamente vio que habia para él, para su hermana y para sus papás (a mi tambien me llego regalo), subio como proyectil a despertar a su hermana y a su mamá y juntos dedicamos 2 horas a abrir esos regalos.

Mi hija cuando bajo lo que quería ver era si los animales habían comido, su sorpresa fue mayuscula cuando vio que solo quedaban un poco de lechuga y un pedazo de zanahoria mordisqueado, los jugos estaban vacios y de las galletas no quedaban más que migajas.

Creo que todo el show vale la pena con tal de saber que al menos un año más mis hijos creen en la magia y con ello siguen alimentando su fantasía.

Saludos