Lo importante es invisible a los ojos más no al corazón
Antoine de Saint Exupery
El pasado lunes 26 de mayo, es decir ayer, celebré junto con mi esposa 7 años de matrimonio.
Me puse a meditar durante la noche en ello y quiere decir que llevamos 2,557 días casados o 61,368 horas o 3’682,080 minutos; la unidad de tiempo la eligen ustedes.
Intente recordar como éramos y que teníamos hace 7 años y el resultado es el siguiente:
Teníamos 25 y 26 años respectivamente, ella trabajaba y yo también, teníamos un auto pequeño, vivíamos en un departamento de interés social en Cd. Nezahualcoyotl, teníamos mucho amor uno por el otro y un sinfín de sueños e ilusiones.
Después de 7 años tenemos: 32 y 33 años, ella no trabaja y yo trabajo doble, tenemos un auto mediano y una minivan, vivimos en una casa con 2 jardines en Metepec, tenemos un hijo de 5 y una hija de 2 años, seguimos teniendo mucho amor y muchos proyectos a punto de cristalizar.
Creo que después de todo estos han sido los 7 años más productivos de nuestras vidas. Y al final de cuentas eso nos llena de alegría y de felicidad.
Existe una teoría que dice que cada 7 años el ser humano se renueva, esto quiere decir que ya no somos (al menos materialmente) los que éramos cuando nos casamos, sin embargo, creo que hemos crecido y madurado. En fin, somos felices.
Deseo que todos ustedes encuentren algún día a alguien con quien puedan compartir su vida, tal y como yo la he encontrado.
2 comentarios:
Muchas feliciades atrasada ahijadito!!!! en verda dme da gusto que tengas a una mujer maravilosaa tu lado y unos pequeños rtaviesos, es lo mejor del matrimonio o de una relacion, yo ya tengo al mio, y en verdad es muy rico despertar con el.
Saluditos!
Es una de los placeres más hermosos de la vida, despertar abrazando a tu esposa.
Saludos y felicidades por que tu ya encontraste al tuyo
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