miércoles, 3 de septiembre de 2008

Nada es bueno y nada es malo


Nada se olvida mas despacio que una ofensa; y nada mas rápido que un favor.
Martin Luther King


Un día no tan lejano meditaba acerca de las características del bien y del mal, mejor dicho, meditaba acerca de la bondad y la maldad, de la forma en que el común de nosotros reaccionamos a una acción buena o mala y el la permanencia de ambas.

Inicialmente quiero manifestar que para mi nada es bueno y nada es malo (excepto las virtudes y los pecados capitales) per se. Las acciones humanas por lo general simplemente son. Se adhiere a ellas un juicio de valor cuando se insertan en un contexto y es entonces cunado se vuelven buenas o malas.

Me explico con un ejemplo simple. Juan conduce su auto a exceso de velocidad. En teoría esto es un acto “malo” sin embargo gracias a eso Juan llega a tiempo a su cita lo que lo convierte en una “buena” acción.

A partir de nuestra percepción etiquetamos las acciones. Es decir que si a mi me causa placer, bienestar o en general sensación de bien, digo que la acción fue “buena”, si ocurre lo contrario digo que es “mala”.

Los humanos somos buenos por naturaleza. Nadie (bueno, casi nadie) se levanta en la mañana y antes de bañarse piensa que ese día va a esparcir el mal por su camino. Sino como explicamos que en general las sociedades humanas funcionen bien. Sin embargo el mal se mete en nuestros pensamientos y se afianza, haciendo que más de la mitad de nuestros pensamientos giren en torno a él. Eso nos roba energia y tiempo de pensar en la bondad.

Por eso te invito a que a partir del día de hoy no permitas que los pensamientos y sensaciones negativas habiten tu cuerpo ni tu mente y que comencemos a generar una masa de bienestar contigo mismo y con tus semejantes.

PD…si, ya lo se, pero juro que no he fumado nada prohibido. Tengan bonito día